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Terapia para adultos de estrés postraumático

Terapia para adultos

Estrés postraumático

Una fobia es un temor a situaciones o cosas que no son peligrosas y que la mayoría de las personas no las encuentran molestas. Se caracterizan por generar un miedo intenso, desproporcionado e irracional ante objetos o situaciones concretas. Se consideran que son un tipo de trastorno de ansiedad.Existen muchos tipos de fobias que podemos agrupar en dos grandes categorías:

  • Fobias simples o específicas: se suelen desarrollar en la infancia o adolescencia. Incluyen las fobias ambientales como miedo a las alturas, gérmenes, las corporales como miedo a la sangre o inyecciones, las sexuales como la ansiedad desempeño o las situacionales como pánico escénico.
  • Fobias complejas: se suelen desarrollar en la edad adulta y generan ansiedad provocada por una situación concreta. Las más comunes suelen ser la agorafobia y la fobia social. Limitan la calidad de vida de la persona y suelen ser más aún más debilitantes que las fobias simples.
  • Síntomas comunes:
  • Síntomas físicos: sudoración, respiración anormal, aceleración del latido del corazón, temblores, escalofríos, dolor en el pecho, sequedad de boca, mareos, dolor de cabeza, etc.
  • Síntomas psicológicos: pensamientos distorsionados respecto a la situación o estímulo.
  • Síntomas conductuales: evitación de la situación o estímulo temido.

La genética, el medio ambiente, los cambios en la actividad cerebral y las experiencias negativas de la vida pueden precipitar a desarrollar una fobia.El tratamiento puede ser combinado con psicofármacos y en cuanto al tratamiento psicoterapéutico se basa en la exposición progresiva a los estímulos fóbicos, entrenamiento en técnicas de manejo de la ansiedad, restructuración cognitiva entre otras técnicas terapéuticas que se muestran eficaces.

Cambios en reacciones físicas y emocionales:

Los síntomas de los cambios en las reacciones físicos y emocionales (también llamados síntomas de excitación) pueden ser:

  • Asombrarte o asustarte fácilmente
  • Estar siempre alerta al peligro
  • Conducta autodestructiva, como por ejemplo beber en exceso o conducir demasiado rápido
  • Trastornos del sueño
  • Dificultad en concentrarte
  • Irritabilidad, arrebatos de ira o conducta agresiva
  • Sentimientos abrumadores de culpa o vergüenza

Las causas son muy diversas, pero es común el haber experimentado circunstancias peligrosas o traumáticas, traumas infantiles, miedo extremo en el pasado, antecedentes familiares de enfermedad mental, haber sentido terror, tener poco apoyo social tras un acontecimiento altamente traumático entre otros.El tratamiento es diverso y la psicoterapia y los psicofármacos como los antidepresivos, de manera independiente y/o combinada, son formas de tratarlo. El EMDR y el Progressive Counting son dos importantes tratamientos psicoterapéuticos, eficaces en la mejora del trastorno como opciones terapéuticas principales usadas en el Centro de Psicoterapia Laura Requena.

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